Las slots se han convertido en uno de los juegos de casino más populares. A estas alturas, son reconocidas y apreciadas en todo el mundo por la gran calidad y variedad de los desarrollos que se presentan cada día.
Además de distinguirse por factores tales como diseño, temática, cantidad de líneas de pago y funciones especiales, entre muchos otros, las tragaperras también difieren en el rango de apuestas que aceptan.
Configurando la apuesta
Antes de comenzar a jugar a cualquier slot, lo primero que hay que hacer es configurar la apuesta. Decisión que puede ser modificada antes de cada giro. La gran mayoría de estos juegos habilitan un rango de apuestas que permiten que accedan a ellos jugadores de todos los presupuestos y estilos de juego.
Pero entre ellos hay títulos que habilitan mínimos de apuesta verdaderamente bajos, que pueden alcanzar a ser de un céntimo. ¿Es bueno jugar con un nivel de apuesta tan bajo? ¿Cuáles son las ventajas y las desventajas?
Antes de analizarlo, es importante resaltar que en muchas de estas slots ese nivel de apuesta debe multiplicarse por cada línea de pago que entre en juego. En algunas, las líneas de pago son variables, es decir, el jugador elige con cuántas jugar. Por este motivo, efectivamente se puede hacer girar los rodillos por un céntimo. Pero, en otras, la cantidad de líneas de pago es fija o tiene un mínimo configurable, por lo que la apuesta nunca llega a ser la mínima.
Entre las ventajas de jugar con niveles de apuesta tan bajos se encuentra la de poner en riesgo muy poco presupuesto. Sin embargo, si para ello hay que, por ejemplo, limitarse a jugar con una sola línea de pago, las probabilidades de ganar se reducen notablemente.
Por otra parte, muchas de las tragaperras online actuales ofrecen importantes bonificaciones y/o jackpots. Y, muchas de ellas, requieren que se juegue con un mayor nivel de apuesta para tener la posibilidad de acceder a ellos. Esto deja en manos del jugador decidir cuánto se quiere arriesgar para intentar ganar más.
Un juego más conservador
Los niveles de apuesta mínimos son ideales para que los jugadores que recién se inician en el mundo de las slots puedan probar los títulos sin arriesgar demasiado. También para los más experimentados que prefieren un estilo de juego más conservador.
Al jugar con la apuesta mínima hay que tener en claro que, por lógica, las ganancias de línea que se obtengan serán también reducidas. Sin embargo, no hay que creer que esto impide de cuajo aspirar a ganar un premio grande. La suerte siempre está detrás de cada giro y, aunque las probabilidades sean menores, no dejan de existir.
Una de las slots más populares que permiten jugar con niveles de apuestas bajos es Gonzo´s Quest, de NetEnt, En este entretenido juego online es posible hacer girar los rodillos por tan solo 0,01 euros.
Indicadores del comportamiento de pago de las slots
A la hora de elegir una slot, si lo que se quiere es saber cómo y cuánto paga, hay que observar su RTP y su volatilidad o varianza. El primero de estos indicadores refiere a la tasa de devolución del dinero que la slot mantiene a largo plazo y según datos estadísticos. El promedio de estos juegos es de 96 %, pero el rango va desde 94 % hasta arriba de 98 %.
La volatilidad, por otra parte, hace referencia al volumen de los premios que se entregan y la frecuencia con que esto sucede. Hay slots de volatilidad baja, media y alta. Las últimas son las que ofrecen ganancias más abultadas, pero que se reparten con mucha menos asiduidad que las que se entregan en slots con volatilidad baja.
Ambos indicadores son reveladores y deben ser tenidos en cuenta no solo a la hora de elegir a qué jugar, sino también al momento de configurar las apuestas. Por ejemplo, saber que las de volatilidad alta requerirán realizar una mayor cantidad de giros para obtener premios, lleva a configurar apuestas de menor tamaño para lograr hacer rendir más el presupuesto.
Apostar con responsabilidad
El mundo de las slots es tan rico y diverso que permite el acceso a jugadores con toda clase de gustos, estilos de juego y presupuestos. El rango de valores de apuestas permitidos suele ser amplio y, en algunos casos, habilitan un mínimo realmente bajo.
Lo importante siempre es saber regular el presupuesto que se dispone para el juego de una manera responsable. Solo así se puede garantizar que la diversión no se acabe y que el entretenimiento rendirá por más tiempo.
